A continuación te dejamos los elementos básicos que debes de tener en cuenta para tu alimentación:
GLUCOSA: es nuestro combustible. Se encuentra presente en la fruta, miel, azucar, pan y arroz.
FÓSFORO: es vital para el desgaste intelectual. Está en la yema del huevo, quesos, almendras, avellanas y nueces.
MAGNESIO: refuerza las neuronas. Está en las almendras, avellanas y semillas de cacao.
POTASIO: necesario para compensar el desgaste muscular, a través de la banana o el tomate.
COMPLEJO B: ayuda a la absorción de las vitaminas. Lo incluyen el jamón y la levadura de cerveza.
VITAMINA C: es necesaria para superar los procesos infecciosos, la regeneración de los tejidos conjuntivos y la calcificación de huesos. Se encuentran en los kiwis, cítricos, el ananá y las frutillas.
En caso de que tengas alguna patología, te recomendamos que visites a un profesional de la salud respecto al tema de nutrición. Ellos podrán detallarte y hacerte un plan de comida adecuado a vos.